Además de London Pass, existen otras tarjetas que permiten ahorrar algo de dinero en nuestra estancia en Londres al mismo tiempo que facilitan los desplazamientos por la ciudad:
TRAVELCARD: este abono de transporte permite viajar ilimitadamente en transporte público, incluyendo el metro, el autobús y el tren (excepto los servicios al aeropuerto). Se puede adquirir para 1, 3 o 7 días y debemos elegir las zonas de cobertura de nuestra tarjeta. Para este último caso, consideramos suficiente adquirir una que cubra las zonas 1 y 2 del transporte público de Londres, ya que ahí es donde se encuentran la gran mayoría de los principales monumentos de la ciudad. También se puede elegir la opción de comprarla con la posibilidad de usar el transporte público antes de las 9,30 horas (horas punta) y durante todo el día, denominada Travelcard Peak (más cara) o bien con la opción de usarlo a partir de las 9,30 horas durante todo el día, Travelcard Off-peak (más barata). La Travelcard se puede adquirir en las estaciones de metro, en los centros de información turística o en los numerosos «tickets stops» que encontrarás por Londres. Lo que realmente queda claro, es que usando cualquier modalidad de la Travelcard te ahorrarás una buena cantidad de dinero al no tener que comprar billetes individuales en cada uno de tus desplazamientos.
OYSTER: también se trata de una tarjeta de abono de transporte, con la peculiaridad de que tiene una duración ilimitada y su funcionamiento es similar al de un móvil de tarjeta prepago, es decir a medida que el saldo se va agotando puedes ir recargándolo y al final de tu estancia, podrás solicitar la devolución de la cantidad no consumida o bien usarlo en un futuro viaje a Londres. Es muy utilizada por residentes y por viajeros que se desplazan con cierta asiduidad a la capital inglesa. Es algo más cara que la Travelcard.
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